La violencia de género, una realidad que necesita ser abordada desde la salud mental
La violencia de género: una realidad que necesita ser abordada desde la salud mental
La violencia de género es un problema que trasciende fronteras, culturas y estratos sociales. Según la Organización Mundial de la Salud, una de cada tres mujeres en el mundo ha experimentado violencia física o sexual en algún momento de su vida, generalmente por parte de una pareja o expareja. Este fenómeno no solo deja cicatrices físicas, sino que también tiene un impacto profundo en la salud mental de las víctimas.
¿Qué es la violencia de género?
La violencia de género se refiere a cualquier acto de agresión o abuso ejercido contra una persona debido a su género. Aunque afecta mayoritariamente a mujeres y niñas, también puede darse en otros contextos. Esta forma de violencia puede manifestarse de distintas maneras:
- Violencia física: Golpes, empujones o cualquier tipo de agresión que cause daño físico.
- Violencia psicológica: Insultos, manipulación, control, amenazas o aislamiento.
- Violencia sexual: Abusos, acoso o cualquier acto que vulnere la integridad sexual de la víctima.
- Violencia económica: Control de los recursos económicos para limitar la autonomía de la víctima.
Impacto de la violencia de género en la salud mental
Las consecuencias psicológicas de la violencia de género son devastadoras y pueden incluir:
- Trastorno de estrés postraumático (TEPT): Flashbacks, pesadillas y ansiedad persistente.
- Depresión: Sentimientos de desesperanza, aislamiento y tristeza profunda.
- Ansiedad: Sensación constante de miedo o peligro.
- Baja autoestima: La víctima puede sentir que su valor personal ha sido disminuido.
- Dificultades en las relaciones: El trauma puede dificultar establecer vínculos de confianza.
Además, muchas personas que han sufrido violencia de género recurren a mecanismos de afrontamiento como el abuso de sustancias, lo que agrava aún más su situación.
El papel de la terapia en la recuperación
La violencia de género no solo afecta a quienes la sufren directamente, sino también a su entorno. Buscar ayuda profesional es fundamental para romper el ciclo de la violencia y reconstruir una vida plena. En este sentido, la terapia psicológica juega un papel crucial:
- Proporciona un espacio seguro para expresar emociones.
- Ayuda a identificar patrones tóxicos y trabajar en ellos.
- Facilita herramientas para gestionar el estrés y la ansiedad.
- Refuerza la autoestima y la resiliencia.
¿Cómo podemos ayudarte en Nordés?
En la Clínica de Psiquiatría y Psicología Nordés, entendemos la complejidad de la violencia de género y su impacto emocional. Nuestro equipo de profesionales está capacitado para ofrecer acompañamiento psicológico individualizado, terapias de grupo y orientación a familiares.
No estás sola. Rompe el silencio y busca ayuda hoy. Agenda una primera sesión gratuita con uno de nuestros especialistas y da el primer paso hacia tu recuperación. Contáctanos ahora; estamos aquí para ti.