Los trastornos psicóticos en adolescentes merecen toda tu atención, en lo relativo a la detección temprana de los síntomas. Nuestro apoyo profesional te puede ayudar a que tu hijo o familiar recupere su estabilidad mental. Repasamos las alteraciones más frecuentes y cómo se pueden superar.
Características de estos trastornos psicóticos
Comentamos cuáles son los trastornos psicóticos más relevantes durante la adolescencia para que no tengas ningún problema a la hora de conocer qué está pasando, exactamente, en la mente de esa persona.
Los sintomas psicoticos
Entre los síntomas psicóticos más recurrentes se encuentran varios que crean un patrón de comportamiento muy concreto y fácilmente identificable. Nos referimos a:
- Un estado de hipervigilancia, la alteración de la personalidad y un aumento de la desconfianza.
- Las complicaciones a la hora de comunicarse correctamente. Se emplean expresiones sin sentido y la conversación no sigue un hilo narrativo lógico.
- El aislamiento y el cambio drástico en el comportamiento.
- El cambio en el ciclo de sueño. Se combina el insomnio con dormir durante el día.
- Lucir una imagen más descuidada.
- El consumo habitual y en secreto de estupefacientes y alcohol.
- La repentina aparición de alteraciones severas de la personalidad, en forma de gastos desmedidos, del abandono del hogar sin informar a nadie...
En cuanto detectes algunos de los síntomas anteriores, debes contactar con un profesional para que comience el proceso de terapia. El motivo no es otro que evitar que la persona termine desarrollando alguno de los siguientes trastornos.
El trastorno delirante
El trastorno delirante se puede reconocer por los propios comentarios que realiza el adolescente. Es habitual que indique que se siente explotado. También presenta serias dudas sobre la fidelidad de su pareja o su grupo de amigos. Igualmente, todo lo positivo que le sucede lo considera como una amenaza. Tampoco puede superar una situación negativa y guarda muchísimo rencor. Finalmente, si interpreta que alguien le hace algún desprecio, no tarda en responder. El trastorno se divide en varios tipos:
- Erotomanía. El adolescente considera que otra persona está enamorada de él y comienza a acosarla o vigilarla para conseguir su propósito de tener una relación.
- Los celos. Siempre piensan que su hermano es el favorito de sus padres o sus amigos no les son fieles. Podría llegarse a la agresión, en casos muy graves.
- La manía persecutoria. El joven considera que alguien le persigue en todo momento y su vida está en peligro. Ello provocaría que terminase por denunciar la situación a la policía o reaccione de una forma violenta.
- El trastorno psicosomático. Se imagina la persona afectada que tiene una dolencia concreta en una parte de su cuerpo, sin ser esto cierto. La gravedad de esta situación dependerá del grado de intensidad del trastorno.
La psicosis paranoide
Deben observarse los síntomas prodrómicos (más leves y arriba comentados) para apostar por la terapia de la psicosis paranoide cuanto antes. En caso contrario, el joven terminará por poner en peligro su vida al sentir una amenaza constante contra ella. Al igual que en el trastorno delirante, lo más adecuado son la psicoterapia y el empleo de medicamentos, bajo prescripción de un profesional. Será clave que se inste al adolescente a abandonar los malos hábitos y socializar progresivamente.
Como has comprobado, los trastornos psicóticos en adolescentes pueden convertirse en un problema de mayor gravedad, si no se tratan de forma adecuada. De ti dependen repasar la información anterior y observar cómo se comporta el adolescente con el que convives. No dudes nunca a la hora de solicitar ayuda profesional para evitar que esa persona arriesgue su integridad poniéndose en peligro o protagonice una situación que pudiera acarrearle consecuencias legales.